Sección de Niños y Niñas

una muñeca vestida de azul, un dinosaurio de tela, un mounstro de plástico y un instrumento musical sobre una alfombra blanca

De hace un par de años para acá, tengo conciencia sobre la lucha por borrar la línea entre roles de géneros. Y aunque siempre me ha parecido buena idea, hasta que tuve una niña le puse más atención al tema.

Desde antes de estar embarazada sabía que no quería que mi hij@ creciera con un ideas preestablecidas sobre que es o como debería de comportarse, por si quiere salir del camino que la mayoría recorre, no sienta que está haciendo algo mal.

Mucho del aprendizaje sobre como debemos de comportarnos viene de la familia, y está en mi poder enseñarle y darle su libertad, pero también creo que hay cosas externas que influencian sus ideas y más importante, imponen límites en su vida en cosas tan simples como qué tipo de ropa usar o a qué jugar.
SECCIÓN DE NIÑOS Y NIÑAS
Entre más pronto le enseñe que no hay cosas destinadas a un sexo específico (salvo las biológicas, que ahora también pueden cambiarse), mejor. Pero aunque ya hay más variedad en artículos infantiles, aún las tiendas tienen la sección de niños y niñas: hay rosa, princesas y coronas por un lado, superhéroes, carritos y azul por el otro.

una niña con pijama de rallas azules y blancas acostada sobre una sábana azul.

No quiero que la Camila juegue solo a la casita, que sienta que no debe de sentir curiosidad por los carros, pero no puedo hacer cambiar a las grandes corporaciones, ni me la pienso pasar haciendo corajes cada vez que le compre ropa o juguetes, así que decidí borrar en mi mente la línea divisoria de géneros de las tiendas, ahora veo a la sección infantil como una sola y agarro la ropa que me gusta para mi hija, sin fijarme de que lado la tomo, o juguetes sin ver quien sale en el empaque.

que no tenga que decidir entre ser valiente o sentirse aceptada…

Si creo que debemos de meter más presión para que cada vez sea menor la línea divisoria entre los roles de género, en los trabajos, empaque y presentaciones de cosas y si a las marcas les preocupa perder parte del mercado conservador, pues que hagan distintas versiones. Pero también nosotros debemos de quitarnos prejuicios y dejar de ver colores y estilos para sexos específicos, que las compañías no decidan sobre lo que deben hacer nuestros hijos.

Y la verdad es que hasta yo me compro cosas “de hombre”. Odio las etiquetas, las imposiciones, lo “debes de”, espero que a mi hija le toque una sociedad mejor preparada para la libertad, que no tenga que decidir entre ser valiente o sentirse aceptada y ese es el trabajo de todos los padres de hoy.